Como todo en esta vida de convertirse en costumbre para que algo cuaje. Esta Red, cuanto más le voy pillando el gusto, cae y se lleva días sin conectar. Los clones quedaron en un lejano pasado. Como no se termina en convertir en costumbre, no termino por arrancar.
Siento que no esté compartiendo mucho por aquí. Creo que es un proyecto interesante pero el tiempo del que dispongo es escaso para dedicar más.
No me despido pero sólo quería dejar una pequeña huella para dar señales de vida, si hay alguien más allá de este teclado virtual desde el que escribo.
Os sigo leyendo, en ocasiones levanto el dedo y otras comparto pero leo más, más allá de esas escasa interacciones.
Un saludo desde un bote sin remos en medio del estigia.