En el Manual de Oxford de Karl Marx, Thomas Rotta y Rodrigo Teixeira contribuyen con un capítulo llamado “la mercantilización del conocimiento y la información". En este capítulo, argumentan que el conocimiento es "trabajo inmaterial" y que las "mercancías del conocimiento" están reemplazando cada vez más a las mercancías materiales en el capitalismo moderno.
"Ejemplos de productos de conocimiento son todo tipo de datos comercializados, software de computadoras, fórmulas químicas, información patentada, música grabada, composiciones y películas con derechos de autor, y conocimiento científico monopolizado".Según Rotta y Teixeira, estos productos de conocimiento no tienen ningún valor en términos marxistas porque su reproducción tiende a ser gratuita. El conocimiento se puede reproducir infinitamente sin coste. Autores anteriores han afirmado que debido a que las mercancías del conocimiento no tienen valor, la ley del valor de Marx ya no es válida. Rotta y Teixeira argumentan que pueden restaurar la ley del valor de Marx como explicación de las mercancías del conocimiento. Y su solución es que, aunque los productos de conocimiento no tengan valor, los propietarios de dichos productos a través de patentes y derechos de autor, etc. pueden extraer rentas de sectores capitalistas productivos, de la misma manera, como explicó Marx, que los terratenientes (a través de su monopolio de tierra) extraen rentas de capitalistas productivos. Concluyen estimando la mayor cantidad de valor que se extrae en forma de "rentas" por parte de las "industrias del conocimiento".