CARTA A LOS AMIGOS DESAPARECIDOS

AQUI estabais y cual un espejo
En mis manos os cobijaba
La ola y el sol de junio
Se llevaron vuestra cara
Diariamente os he ido escribiendo
Y mis misivas os las llevaban
Palomas y también niños
Pero nadie regresó
Y os sigo escribiendo
Ya pasó normalmente agosto
Pese a los obuses y las rosas
He traducido algunas cosas
En el idioma azul que ya conocéis
Ahora con el otoño me da miedo
Y las noches de invierno sin vosotros
¿Por qué no venir a la cita
Que este amigo perdido os fija
En su región del tiempo de los lobos?
Sí, venid, os estoy llamando
Con las palabras de entonces
Mucho frío hace bajo mis hombros
Y dos agujeros negros hay en mis alas.
LETTRE À DES AMIS PERDUS
VOUS étiez là je vous tenais
Comme un miroir entre mes mains
La vague et le soleil de juin
Ont englouti votre visage
Chaque jour je vous ai écrit
Je vous ai fait porter mes pages
Par des ramiers par des enfants
Mais aucun d'eux n'est revenu
Je continue à vous écrire
Tout le mois d'août s'est bien passé
Malgré les obus et les roses
Et j'ai traduit diverses choses
En langue bleue que vous savez
Maintenant j'ai peur de l'automne
Et des soirées d'hiver sans vous
Viendrez-vous pas au rendez-vous
Que cet ami perdu vous donne
En son pays du temps des loups
Venez donc car je vous appelle
Avec ious les mots d’autrejais
Sous mon épaule il fait bien froid
des trous noirs dans les ailes.Fuente:
La nube habitada - FronteradRené Guy Cadou
La breve existencia de René Guy Cadou transcurrió en Bretaña, en los pequeños pueblos en cuyas escuelas trabajó como maestro. Había: nacido en Sainte-Reine-de-Breragne, en 1920, hijo a su vez de un profesor de primera enseñanza que se trasladó poco después a Nantes. En esta ciudad vive el poeta durante su infancia y allí pierde a su madre a temprana edad. Luego sigue los pasos de su padre e imparte clases como maestro suplente en diversas escuelas rurales. Mientras tanto escribe poemas y entra en contacto con Reverdy, con Max Jacob, por el que siente una admiración ferviente, y con algunos escritores jóvenes que, unidos por la amistad y el amor a la poesía, configuran lo que se ha llamado «la escuela de Rochefort». Durante esos años de trashumancia, Cadou publica regularmente libros y folletos de poesía, hasta que se instala en Louisferc, donde vivió los últimos años de su vida. Allí se casó con Hélene, la mujer cuyo amor inspira muchos de sus poemas finales, y allí murió, cuando contaba treinta y un años a La poesía de Cadou, aunque hija del surrealismo y, en general, de los movimientos de vanguardia, supone, sin embargo, un retorno a la vida concreta y a las emociones de lo cotidiano. El amor familiar, el sentimiento de desamparo, los recuerdos infantiles y las oscuras premoniciones de la muerte son los temas de una poesía que, en última instancia, se halla traspasada de inocencia y de confianza en la vida.