“Cualquiera que sea la cultura que haya influido en una mujer, esta comprende intuitivamente las palabras mujer y salvaje”. De esta idea brota la serie de fotografías creada por la fotógrafa Ana Kala, a quien le dedicamos esta sección, y la artista Caroline Fernández. El arquetipo de la mujer salvaje da forma a este proyecto que reflexiona en torno a la animalidad reprimida, la vida y la muerte, la naturaleza salvaje y la expresión del alma.
Esta serie fotográfica es uno de los 171 proyectos seleccionados para la V edición de Mujeres Mirando a Mujeres y la II edición de El poder de la presencia, un colectivo de mujeres que nace para reivindicar el arte elaborado por mujeres y para fortalecer una presencia muchas veces invisibilizada y relegada a un segundo plano.Las imágenes tienen como escenario la provincia de Lugo en el año 2013. Es un proyecto personal elaborado a fuego lento tras años de aprendizaje. Una pequeña Werlisa Star fue la cámara familiar con la que Ana Kala comenzó, aún siendo niña, a adentrarse en el mundo de la fotografía. En ese momento, las excursiones del colegio servían de excusa para practicar, a pesar de que muchas veces las fotos salían oscuras o aparecían las cabezas cortadas por el enfoque de la imagen.