La acostumbrada lección de arte de Jonathan Goodman a la que me gusta asistir, al menos, una vez al mes...
El artista hace valer su doble interés en la existencia de un pueblo puertorriqueño y su posterior diáspora estadounidense y la lengua vernácula no objetiva con la que Nueva York ha comerciado desde antes de mediados del siglo pasado
Juan Sánchez: en busca de una isla, la deshilachada identidad de Puerto Rico - Frontera Digital

El artista Juan Sánchez es un nombre consolidado en el arte contemporáneo. Sus padres puertorriqueños fueron parte de la ola migratoria que llegó desde la isla a Estados Unidos en los años cuarenta y cincuenta. Sánchez nació en Brooklyn, creció en Nueva York y estudió en la Cooper Union. Más tarde, obtuvo su título de máster en Bellas Artes en Rutgers. Aunque el artista vive y trabaja en Nueva York desde hace muchos años –es profesor de arte en el Hunter College–, sigue manteniendo un estrecho vínculo con su legado cultural puertorriqueño. Su obra, compuesta por pinturas, grabados, fotografías y vídeos, ha tenido a menudo una orientación política; entre sus cuadros hay imágenes de héroes sociales latinoamericanos como el Che Guevara y Pedro Albizu Campos, uno de los primeros y más importantes defensores de la independencia puertorriqueña, que pasó varios años en la cárcel por sus creencias. Sánchez creció en una época de virulenta agitación social y política, y se ha mantenido fiel a esa experiencia, a pesar de ser cada vez más aceptado por el mainstream artístico. Su obra encarna una serie de preguntas sobre el compromiso, en especial las relativas a la deshilachada identidad de Puerto Rico, aún presentes.