La libertad supone la ausencia de dominación, no la benevolencia del amo.
https://youtube.com/watch?v=KbeB5ilGQIA
!
Music Box La Oda a la alegría, de Friedrich von Schiller, fue publicada por primera vez en 1786. En ella se lee:
“¡Alegría, hermosa chispa de los dioses
hija del Elíseo!
¡Ebrios de ardor penetramos,
diosa celeste, en tu santuario!
Tu hechizo vuelve a unir lo que el mundo había separado,
todos los hombres se vuelven hermanos allí donde se posa tu ala suave.”
Tres años después de su edición, estalló la Revolución francesa. El tema de Schiller devino un símbolo de la fraternidad universal. Maximilian Robespierre hizo una defensa de la igualdad a través de la fraternidad tan convincente como para hacerla formar parte, en 1790, de la divisa revolucionaria.
Poema completo¡Oh amigos, cesad esos ásperos cantos!
Entonemos otros más agradables y
llenos de alegría.
¡Alegría, alegría!
¡Alegría, hermosa chispa de los dioses
hija del Elíseo!
¡Ebrios de ardor penetramos,
diosa celeste, en tu santuario!
Tu hechizo vuelve a unir
lo que el mundo había separado,
todos los hombres se vuelven hermanos
allí donde se posa tu ala suave.
Quien haya alcanzado la fortuna
de poseer la amistad de un amigo, quien
haya conquistado a una mujer deleitable
una su júbilo al nuestro.
Sí, quien pueda llamar suya aunque
sólo sea a un alma sobre la faz de la Tierra.
Y quien no pueda hacerlo,
que se aleje llorando de esta hermandad.
Todos los seres beben la alegría
en el seno de la naturaleza,
todos, los buenos y los malos,
siguen su camino de rosas.
Nos dio ósculos y pámpanos
y un fiel amigo hasta la muerte.
Al gusano se le concedió placer
y al querubín estar ante Dios.
Gozosos, como los astros que recorren
los grandiosos espacios celestes,
transitad, hermanos,
por vuestro camino, alegremente,
como el héroe hacia la victoria.
¡Abrazaos, criaturas innumerables!
¡Que ese beso alcance al mundo entero!
¡Hermanos!, sobre la bóveda estrellada
tiene que vivir un Padre amoroso.
¿No vislumbras, oh mundo, a tu Creador?
Búscalo sobre la bóveda estrellada.
Allí, sobre las estrellas, debe vivir.
¡Alegría, hermosa chispa de los dioses
hija del Elíseo!
¡Ebrios de ardor penetramos,
diosa celeste, en tu santuario!
Tu hechizo vuelve a unir
lo que el mundo había separado,
todos los hombres se vuelven hermanos
allí donde se posa tu ala suave.
¡Alegría, hermosa chispa de los dioses,
hija del Elíseo!
¡Alegría, bella chispa divina!
Friedrich Von Schiller